Los bebés pequeños desarrollan una relación única, conocida como apego, con sus cuidadores. Para desarrollar vínculos seguros, los bebés deben saber que al menos una persona realmente se preocupa por ellos. Los cuidadores brindan ese consuelo al ayudar a los bebés a regular sus necesidades y emociones, como el hambre y la tristeza. Con apegos saludables, los bebés desarrollan un sentido de seguridad y confianza.
Los bebés necesitan ser cargados, tener interacciones cara a cara, sentir otro latido humano. Al satisfacer estas necesidades, los cuidadores fomentan el apego. Planifique cómo satisfará estas necesidades esenciales, mientras se mantiene a usted y a los bebés a salvo.
Realizamos una revisión de nuestros materiales en español, y es posible que note algunas diferencias en los materiales nuevos y los que tiene usted actualmente. Describimos las diferencias en los siguientes enlaces: